El abogado de la compañía de seguros
Si sufre un accidente de tráfico como conductor de un vehículo o como ocupante (siempre que la culpa no sea de su conductor) es posible que la aseguradora le sugiera que la reclamación de la indemnización a que tenga derecho se la tramite un abogado de la compañía. La cuestión es, ¿qué ventajas e inconvenientes le supone que el letrado de la aseguradora se haga cargo de su accidente de tráfico?
Para empezar hemos de aclarar que el abogado de la compañía de seguros es un profesional de la abogacía que ha firmado un convenio (convenio Unespa) con una determinada aseguradora, en el cual entre otras condiciones se compromete a no pleitear contra dicha aseguradora, a seguir sus instrucciones y directrices y a minutarles en base a unas tablas de honorarios muy (pero que muy) reducidas.
Dicho eso, son profesionales en su mayoría bastante competentes -al menos en Tenerife– . El hándicap de dejar la indemnización por lesiones en accidente de tráfico en sus manos radica en lo expuesto en el anterior párrafo: su cliente no es el lesionado, sino la compañía de seguros del lesionado, por lo que si en un momento dado la aseguradora tiene unos intereses distintos a los del accidentado, puede fácilmente inferirse quién tendrá la preferencia. Por otro lado, es tan poco lo que llega a cobrar un abogado de la compañía que obviamente no puede invertir más tiempo del estrictamente necesario en la reclamación de la indemnización sin que le salga antieconómico el procedimiento. Saben los abogados del seguro además que los clientes que a través de la aseguradora representen no son clientes propios que hayan de volver a su despacho para encargar un tema distinto. Esto hace que en la inmensa mayoría de casos el lesionado en un accidente de tráfico conozca al abogado de la compañía que le va a representar el mismo día del juicio.
El abogado privado de tráfico como alternativa al abogado de la compañía
Un abogado privado especializado en accidentes de tráfico cobrará un porcentaje sobre la indemnización que usted cobre -en FM Abogados Tenerife sólo un 10%-. Esto, que podría parecer un inconveniente frente a la gratuidad del abogado de la compañía, es en cambio una ventaja y una garantía. Ventaja, porque de esta manera nuestro cliente tiene claro que por razones obvias nos interesa que cobre la mayor indemnización posible. Ventaja, porque para ello realizamos un sinfín de actuaciones a las que el abogado de compañía -por lo anteriormente expuesto- no tendrá acceso: asesoramiento personalizado e ilimitado tanto en persona como por teléfono, mail o incluso whatsapp, visitas domiciliarias y en centros de rehabilitación, acompañamiento al médico forense, servicios de valoración médica y reconstrucción de accidentes, etc. Garantía, porque para los abogados privados las compañías de seguros no son nuestros clientes, sino nuestros contrarios. Garantía, porque nuestra mejor publicidad es un cliente contento que nos recomienda.
En FM Abogados somos abogados privados de accidentes en Tenerife desde hace casi veinticinco años, y le animamos a comprobar que la diferencia en el trato, el servicio y los resultados entre un abogado de la compañía y uno privado vale mucho más que ese 10%.